Nos encontramos a Flavio paseando a Pancho en una plaza. Él accedió a conversar bajo la promesa de no quitarle mucho tiempo, pues estaba haciendo un mandado y debía regresar pronto. Nos cuenta que nació en Coquimbo pero debido a su trabajo en una tienda de retail debió mudarse a Santiago, donde vive actualmente.
Se jubiló tras cumplir 45 años en la empresa donde trabajaba, pero la desocupación no le cayó tan bien pues comenzó a sentir que se estaba enfermando por no hacer nada.
Tal como dice de sí mismo es una persona trabajólica, por lo que después de jubilarse consiguió un empleo como conserje. Según nos cuenta, esto mejoró su salud y comenzó a recuperarse. Es este trabajo el que mantiene en la actualidad.
Cuando le preguntamos sobre sus pasatiempos nos dice que solía disfrutar de jugar al fútbol, pero ahora debe abstenerse de practicar este deporte por un problema en los meniscos. En lugar de jugar a la pelota, Flavio baila todo tipo de canciones en las celebraciones familiares que, según nos cuenta, son frecuentes, porque son una familia muy unida.